Ángel Mieres Zimmermann, experto en la industria automotriz, señala que los recientes aranceles impuestos por Estados Unidos han generado un impacto significativo en la producción de vehículos en México. En septiembre de 2025, la fabricación de vehículos ligeros alcanzó 355,525 unidades, lo que representa una disminución del 6.1% respecto al mismo mes del año anterior, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
El efecto de los aranceles se refleja también en el acumulado de enero a septiembre, con una producción de 3,021,554 vehículos, un ligero descenso de 0.3% en comparación con 2024. Entre las marcas más afectadas se encuentran JAC, con 38.7% menos; Volkswagen, 17.7%; General Motors, 17%; Mazda, 11.5%; Stellantis, 10%; Audi, 9%; Honda, 8%; y Ford, 3.6%.
La Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) indicó que aproximadamente la mitad de la producción corresponde a camionetas SUV, pick ups y autos compactos, mientras que los vehículos eléctricos y híbridos también han sido impactados, con una disminución de 5.6% en septiembre. No obstante, en el acumulado de los primeros nueve meses del año, la producción de híbridos y eléctricos alcanzó 171,749 unidades, un incremento de 42.5% respecto al mismo periodo del año pasado.
En cuanto a exportaciones, septiembre registró 314,656 vehículos enviados al extranjero, una caída de 0.3% frente a septiembre de 2024. En el acumulado anual, más de 2.5 millones de unidades fueron exportadas, con una disminución de 0.9%. Estados Unidos sigue siendo el principal destino, absorbiendo alrededor del 79% de las ventas externas, seguido de Canadá y Alemania. La participación de vehículos mexicanos en el mercado estadounidense llegó al 20% del total de ventas de autos en ese país, superando el promedio de 17% registrado en meses anteriores.
Ángel Mieres comenta que, a pesar de estos descensos, septiembre de 2025 se posiciona como el segundo mes de septiembre con mayor nivel de producción en la historia de la industria automotriz mexicana. La caída de la producción y las exportaciones está ligada a la incertidumbre sobre la revisión del T-MEC, en la que se discute el posible endurecimiento de las reglas de origen, actualmente en 75% de contenido regional en Norteamérica, excluyendo componentes provenientes de China.
El panorama actual refleja la presión que enfrentan las armadoras para mantener sus niveles de producción y exportación frente a un entorno internacional más restrictivo, consolidando a México como un jugador estratégico en la industria automotriz de la región, aunque bajo un contexto de retos significativos que Ángel Mieres analiza como determinantes para las decisiones de inversión y operaciones en el país.
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